Ya nadie usa Blogger.com?

Hey! Soy Maddy! 


   Mil disculpas a todas ustedes (a.k.a todas las personas que realmente disfrutan mis historias). Por alguna razón me es imposible terminar alguna. No termine The Abduction Symphony ni The Watching Prince. 
La razón principal es que yo escribo en el momento. Justo lo que siento en ese instante. Y claro, cuando el tiempo pasa & ya no te sientes así, parece que no queda mas de que escribir.
   Se va esa inspiración desbordante que se tenia al principio. 


   El problema es que ahora tengo muchísimo mas tiempo para escribir. Estoy estudiando la prepa en linea. & me paso muchas tardes haciendo literalmente nada! Tengo mucho tiempo para escribir! 
   La cosa es que parece que ya nadie entra a estas paginas. Cada vez que me meto a el blog de alguien, resulta que no ha actualizado en meses! Casi TODOS los blogs están asi! Que ha pasado? 
   Tal vez ya paso de moda tener tu propia historia? Ojala no sea cierto porque recuerdo que era genial ! 
& ahora tengo muchas ideas y tiempo para escribir! 
Seria demaciado triste si en efecto ya todas se olvidaron de las historias/blogs. Diganme que piensan! 


Les gustaria que empezara una nueva historia? Alguien la leería? 

Bloody Touch

   -Vive un poco.-dice Mona.

Respondiendo a mi estado de shock cuando la veo pasar por la puerta a las 9 am. Sus pequeños shorts de mezclilla estan rotos en pedazos estratégicos, su tank top de Skylar Grey ciñe su delgado cuerpo perfectamente, con una manga aventurándose por su hombro. Sostiene sus tenis deslavados en sus manos, sosteniéndolos despreocupadamente por las agujetas. Su cabello esta intencionalmente despeinado, su maquillaje corre por las orillas de su rostro, ha tenido una noche larga. -Toma...- pone sus zapatos en mis manos y sube las escaleras hasta su cuarto. La sigo. 

-Demaciados clientes?-digo. Mona suspira. 

Ella trabaja en el bar Esroch con Matt, su ex-mejor amigo y actual novio. 

Cora y yo estuvimos conmovidas las primeras semanas. 

Despues de todo, literalmente se conocen desde que nacieron. 
Nenna llevo a Matt al parto de Mona... Desde entonces han sido inseparables.

Cuando la primera ola de magia desaparecio, decidieron que se divertian mas bebiendo y escuchando musica alternativa que lidiando con sentimientos. 

Por eso trabajan en Esroch, el lugar mas ruidoso que pudieron conseguir. 

-Sobrepoblación de idiotas...- dice, mientras empapa algo de algodón con desmaquillante M.A.C. Mira su reflejo en el espejo, apenas parpadea. 

-Mamá preguto por ti.- Siempre le digo lo mismo. Pero miento, obviamente.

-Pshyco no ha dado problemas?- me mira por primera vez, con un vestigio de alerta en su rostro. Como si acabara de recordar su realidad. 

-No, ha estado tranquila.- digo, con sierto alivio. 

   Observo a Mona dormir. 

Desde que se graduo de preparatoria ella duerme todo el dia. Por las noches trabaja con Matt.Quieren ahorrar dinero para poder pagar un viaje a Brussels, el lugar con las mejores fiestas en el mundo. 

Pero se que si se va, no regresaría. Jamas la volveria a ver. 

   Mona se mueve a un costado. Duerme tan plácidamente. 
Hace un ruido a cada tanto con su garganta. Completamente relajada.

Quisiera poder volver a dormir así. 

   Pase la noche entera sobresaltandome cada vez que imaginaba una figura a mi costado, cada pequeño sonido aceleraba mi corazón dolorosamente, pero lo mas tormentoso es no poder sacar su voz de mi mente. 

El recuerdo de sus palabras me despertaba a cada tanto. Trataba de descifrar el lió de confusión que había creado en mi cabeza. 

   Pero era su suave y ansioso tono el que me distraía. 

Ansiaba sus ojos grices perforandome con la mirada. 

Quería tener su precencia cerca... por mas perturbante y amenazadora que fuera. Moría por sostener mi mano cerca de su cuerpo, rogando por tocarlo. Pero hubiera matado por respuestas. Mis ojos lentamente empiezan a cerrarse, y me dejo llevar por el cansancio. 

-Bravo...-La voz desconocida me toma por sorpresa, pero por alguna razón mi corazón no arde con dolor. 
Se que no es Row y definitivamente no es Mona. 

Una figura borrosa aparece ante mi. Quiero moverme, levantarme y observarlo; pero no puedo moverme. Permanezco tiesa, a un lado de Mona.

Mi respiración es lenta y pausada, aunque quisiera ser libre de hiperventilar. 

-Almenos esta parte ha funcionado.- Se hacerca un poco mas. 
Es alto, casi tanto como Row. Hacerca un dedo a mi pierna flexionada. 

Recorre ligeramente mi rodilla, su suave toque manda rayos de electricidad por mi espalda. Pero no es doloroso... en cambio, no quiero que deje de tocarme.Su dedo traza suaves circulos. -Ah elegido bastante bien.- su voz es incitante, con un trazo de precaución. 

Al fin lo veo... un par de ojos azules me miran. 

Su largo cabello castaño obscuro toca sus cejas, incluso recostada puedo observar sus gruesas pestañas, sus ojos azules opacan todo otro color. 

Sonríe casi tiernamente. 

  Y en un segundo esta fuera de mi vista. 

   Recupero el control de mi cuerpo. 

Inmediatamente giro y trato de mover a Mona, pero ella balbucea algo, se que esa bien. Miro al rededor, aún intrigada. 

   Quiero gritarle al cielo mi mala suerte. Mi maldita suerte. 

Tomo uno de los cojines enormes de Mona entre mis brazos. 

No tengo respuestas. No se nada. 

Solo se dos cosas: que quiero que me dejen sola. 

Y que un hilo de sangre recorre mi pierna, ahy donde el me toco.

Gone Again.

  

  -Se ha ido.- digo, con un suspiro. 
Miro por la ventana de la recámara de mamá. 
Toco sus largas cortinas color crema. Cora se monto en la camioneta negra y nada despampanante de Harold. No parece su tipo. 
El ultimo "compañero de trabajo" que la recogió tenia un flamante Mercedes. 
Me deslizo hasta la suave cama de mamá. Hace unos minutos la miraba arreglarse, mientras me comentaba alegremente de sus planes para esta noche. Se enfundo en un vestido rojo de Max Azria, maquillo sus ojos con capas de mascara Lancomé y relleno sus labios con Dazzleglass. 
Cora no pasa desprevenida. Toco los suaves y delicados emblemas de sus almohadas. Algo aparece en mi vista periferica...
   El esta aquí. 


  Siento ese pequeño ataque de nuevo. Pero ahora es doloroso. 
Abrazo mi pecho y respiro profundamente. Trato de levantarme, pero la cabeza me da vueltas. -Sigue pasando...-dice, ligeramente frustrado. 
Intento convencerme de moverme, de alejarme hacia un perímetro mas seguro, pero el tiene el ceño fruncido y luce confundido. 
  El luce confundido. Y ahora habla. 


-Que quieres?- Recupero mi voz y mi control, pero no me muevo. 
Se mantiene a un lado de la cama.
-Quiero que pare.- Levanta su mano hacia a mi, casi señalándome pero sin atreverse a acercarse. Su voz es fuerte, mas fuerte de lo que hubiera imaginado viniendo de ese rostro de ángel. 
-De que hablas?- digo. 
-De tu corazón.- Suena tan obvio para el... 
-Quieres matarme?- Pregunto, finalmente moviendome un poco.
-No! Quiero que pare el dolor -lo miro confusa- no es normal...- dice, mas suavemente. Me toma por sorpresa por un momento. 
-Entonces deberías dejar de asustarme. Eso ayudaria.- 
-Tal vez, pero sin mi ayuda morirías.- Sus ojos grises se tornan obscuros.- De todas formas mi ayuda no esta funcionando demaciado, eso sigue ocurriendo.- 


   En vez de preguntarle las preguntas mas vitales he importantes, me levanto, con el corazón aún agitado; me acerco hacia el, con mis pies descalzos; lo miro directo a los ojos y observo sus rasgos delicados. 
   Estoy a unos centímetros de el. 
Me mira con esos ojos grandes, con la expresión mas difícil de leer. 
   Pero su pecho lo delata, su respiración se acelera ligeramente y casi puedo sentir su corazón golpeando sus costillas, así como el mio.  
-Te conozco?- digo, en un tono bajo. 
-No, no lo creo.- Algo incomprensible esta escrito en su expresión.-Pero, yo te conozco a ti.-


   Ni siquiera trato de encontrar algo de sentido en sus palabras. 
Levanto mi mano lentamente, con mis ojos en los suyos, el baja su mirada, siguiendo el curso de mi mano. Mis dedos están apunto de tocar la tela de su 
camisa color vino. Cuando me acerco, toma una bocanada de aire y se aleja.
-Mi nombre es Row.- dice, con la expresión compuesta.- Y ya se que eres Rhea.- me regala una media sonrisa. 
   Esa sonrisa melancólica la he visto antes. -Que haces aquí?- Parte de mi cordura regresa a mi. -Que eres?.


-Soy el príncipe Row.- dice, casi feliz de decir las palabras.- Estoy aquí para protegerte.- Suelto una risita nerviosa. 
Extiendo mi mano. -Yo soy la princesa Leia.- Río casi franáticamente. 
   Parece ofendido, pero solo sonríe.
-Sabia que te reirías, te he estado vigilando.- 
-Creo que te he visto por ahí.- sigo riendo tontamente. 
-Tengo que cuidar de tu corazón, por eso estoy aquí.- directo a los negocios, nada de rodeos.
-Eres un fantasma oh algo así?- cierro los ojos sospechosamente y suelto una carcajada. 
-Estoy tan vivo como tu. Pero vengo de un lugar muy diferente, Rhea.- 
   No digo nada, derrepente no tengo mas sentido del humor. 
-De donde, exactamente?- 
-De Dynmor. Se que tienes muchas preguntas, pero por tu salud no debería decirte todo ahora.-
-Porque me hablas ahora? No parecías muy interesado antes...- levanto una ceja. 
-Necesito llevarte conmigo.- habla lentamente.- Esta vez por mas tiempo. Todo lo que he intentado antes no ha funcionado, aparentemente. Pero puedo ayudarte. Voy a salvarte. Te lo prometí.- se voz se torna desesperada.
-Esta vez? Que has intentado?.- un torbellino de confusión me revuelve el estomago.- Me lo... prometiste?.-


   Lentamente acerca sus dedos a un costado de mi rostro, tratando de tocar mi mejilla. Inhala lentamente y se acerca un poco, sin tocarme. 
-Rhea, yo a ti si te recuerdo.- Me estremezco y en un parpadeo, su alta figura desaparece de mi vista. 
   Se ha ido. 


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MUCHAS Gracias a Lucero de estoesloquepiensoenverdad.blogspot.com & directoriodenovelas.blogspot.com por publicar mi historia en el Directorio de Novelas! Mil gracias(: Pasense por su blog! Tiene una historia muy interesante(; 
   Como ven no seguire con The Abduction Symphony. Mi vieja laptop rosa murio :S 
Ademas de que pasaron muchas cosas en mi vida que me quitaron la inspiración para esa nove.Pero espero que les guste The Watching Prince & el nuevo look de la pagina(: 
   Love, Maddy.

Watching Me.

  El sigue mirandome.
No ah parado desde la ultima hora. Siento sus ojos en mi rostro, en mis manos ansiosas, e inevitablemente en cada movimiento ligero de mi cuerpo. Los mios se fijan en el tazon rosa lleno de nieve de vainilla.
  Necesito que pare. Quiero que se vaya.
Mi mano sigue temblando incontrolablemente, asi que prefiero no moverme. Me quedo quieta, viendo mi postre derretirse al olvido y mantengo mi rostro bajo. Nisiquiera soy capaz de disfrutar un helado con mi familia. 
Un segundo, relato el final de America's Next Top Model a mi madre, tratando de obtener un poco de su atención; y al siguiente, esa figura larga y esbelta aparece a unos centimetros de los sillones importados.


No entiendo porque hace esto. No lo necesito aqui, almenos no ahora. 
El nunca dice nada, solo se queda ahy. Mi paciencia esta vacilando, deberia mencionar algo. Por un diminuto instante me atrevo a mirarlo.
Algo extraño me aprieta el corazón, un pequeño ataque me inunda los sentidos- desearia atreverme a tocarlo.
Su labio inferior tiembla un poco. Se estremece ligeramente. 
El es como esa canción que nunca he oido. Me duele regresar mi mirada al enorme tazon rosa. Se perfectamente que no debo mirarlo.


-Que te pasa?- la fuerte voz de mi madre me saca de ese trance. Tiene su celular en la mano, no me mira.
Podria no contestar, pero lo hago.-Nada-digo con desociego- hubiera preferido que ganara Nik. Hace un pequeño sonido pensativo mientras frunce el ceño, finalmente baja el celular.
-Hoy saldre con Harold- sus ojos miel me examinan, como evaluando mi expreción- Te puedes quedar sola?-
No. Podria no estar aqui cuando regreses. Podria haberme ido para entonces
Pienso en decenas de respuestas pero solo aciento.
-Donde esta Mona?- digo algo esperanzada. 
Mamá pasa su mano por su cabellera obscura. -Con Matt. Deverias hablar con ella, no deberia pasar tanto tiempo con el, no necesita quedar embarazada...- dice, en su tono mas severo, para variar.
-Mamá!- siento la ira de Mona, incluso cuando no esta aqui.


Mona tiene diferentes formas de canalizar los prolemas. Es solo un año mayor que yo. Le gusta salir a fistas, llegar a casa a las 5.am y despues
pasarce todo el dia con resaca. 
Hoy esta en una de sus "pijamadas" con su novio Matt. Ella es un poco mas alta que yo, con el cabello castaño claro; largo y liso, es delgada y hermosa. Ojala fuera lo suficientemente valiente para tener su vida. 
Al contrario, yo me mantengo callada y sigo las ordenes de mamá, trato de hacerla feliz. Pero cada semana es mas dificíl.


Recuerdo la primera vez que lo vi a el. Cora habia tenido un largo dia en el trabajo, tan pronto cruzó la puerta supe que estaba cansada, he incluso peor...iracunda. Escuche el sonido de sus tacones Louboutin dirigiendose al
telefono. Cuando salio de su recamara empezo a gritarme, habia ovidado lavar los platos. Pero supe que habia algo mas. Williams & Terrance, la firma de abogados mas exitosa del norte del pais, habia perdido el caso mas grande del año, ese que mamá manejaba.


El sonido de sus gritos me atravesaba la piel, su voz era fuerte y sus palabras puntiagudas. Cuando llegue a mi cuarto ella seguia gritando, empezo a arrojar cosas y escuchaba el fuerte estrepito de vidrios contra la pared.


Cerre la puerta rapidamente, me fui deslizando poco a poco hacia el suelo frio. Tape mis oidos y contube las lagrimas lo mas que pude. Sollozaba lo mas silencioso que podia. Gire mi rostro hacia mi cama, buscando mi celular, necesitaba llamar a Mona. 
En vez de eso un par de ojos grandes me miraban.


Estaban tan cerca de mi, ese color grisaceo era duro y penetrante, pero su expreción parecia suave, casi sorprendido. 
Quize gritar, pero habia algo en el... 
Estaba apoyado en sus rodillas, lo mas cerca que podia estar de mi sin
tocarme. Pronto el terror desaparecio.El sentimiento de horror fue remplazado por uno de disturbio, de un panico menguante. Esa primera vez lo mire por largos minutos antes de moverme un solo centimetro. 


Entonces me levante con esfuerzo, con largrimas aun en las mejillas, el hizo lo mismo, pero en completo silencio y con fluidez.
Quize preguntar algo, pero al instante de conciderarlo, el nego con la cabeza.
Su lacio cabello rubio casi tocaba sus hombros. Miro a la cama, estaba cansada, así que sin pensarlo me sente. Esta vez, levanto el brazo y apunto a una de mis almohadas mas comodas. 
Mire confundida, entonces entendi lo que queria, me recoste.


Se hacerco al borde de la cama, su mano sobre la mia pero sin tocarme, recorrio su mano por el largo de mi brazo. Cuando llego a la parte alta de mi hombro parecía dibujar lineas, no me altere cuando inclino su mano a mi rostro, aún sin tocarme.


Supe que habia algo mal, algo antinatural con su precencia, pero tambian habia algo familiar, algo calido, tranquilizante. 
Como si siempre hubiera estado en mi recamara. No supe en que momento me quede dormida, pero cuando volvi a abrir los ojos el no estaba ahy.